Tala inmoderada en méxico

Una gran diversidad de bosques y selvas cubren 64.5 millones de hectáreas en México, representando el 33% del territorio nacional. Estos bosques tienen un alto valor de biodiversidad, producen numerosos beneficios económicos y son críticos para el bienestar de muchas comunidades, depositarias de conocimientos ancestrales sobre sus recursos naturales.
Los bosques templados de pino, encino y oyamel generalmente se encuentran en la parte alta de las montañas. México es centro de diversidad tanto de pinos como de encinos con más del 50% de todas las especies de pino y más de 150 especies de encinos del planeta. En estos bosques habitan una gran cantidad de especies, entre las que sobresalen el oso negro, la cotorra serrana y la mariposa monarca.

Objetivo

Contribuir a la conservación y uso sustentable de los ecosistemas forestales del país, apoyando la elaboración de estrategias de conservación y su implementación a escala local, regional, estatal y nacional, trabajando con comunidades indígenas, organizaciones civiles, instituciones académicas y dependencias de gobierno municipal, estatal y federal.
Sus principales líneas de acción son:
Visión y Coordinación Regional. Identifica las prioridades de conservación considerando procesos ecológicos, representatividad de ecosistemas, requerimientos espaciales de poblaciones viables, conectividad, servicios ambientales y aspectos socioeconómicos.

Áreas Protegidas. Apoya el diseño, creación, implementación, manejo y evaluación de áreas protegidas, incluyendo parques nacionales, reservas de la biosfera y áreas comunitarias protegidas.Manejo Forestal Integrado. Impulsa la integración de alternativas económicas compatibles con la conservación, como el buen manejo forestal -incluyendo la certificación-, la producción de servicios ambientales y el ecoturismo.
Políticas Públicas Nacionales e Internacionales. Contribuye al diseño e instrumentación de políticas públicas y de estrategias nacionales e internacionales de conservación.
Reforestemos México

La marabunta humana avanza letalmente devorando entre 300 mil y 700 mil hectáreas de bosques y selvas mexicanos al año dañando servicios ambientales como la recarga de mantos acuíferos y la estabilización de suelos, además de acabar con la gran variedad de flora y fauna y de generar, según organizaciones internacionales, el 14 por ciento de las emisiones de gases del efecto invernadero.
Sabemos que la gran pérdida de bosques se debe a la expansión de la mancha urbana; a los asentamientos irregulares; a su conversión en zonas agrícolas y en praderas, para la ganadería; a la tala inmoderada que la corrupción, el crimen y la ineficiencia sólo han fortalecido y a los devastadores incendios de cada año.
56.5 millones de hectáreas, casi un tercio de la República Mexicana, está cubierta de bosques y selvas, siendo el país con más especies de pinos y encinos del mundo y de muchas especies exclusivas con tasas de crecimiento superiores a la de la mayoría de los países. Sin embrago, el 80 por ciento de esta cobertura forestal es propiedad de comunidades rurales o indígenas, paradójicamente el 20 por ciento más pobre y marginado de la sociedad mexicana.

De acuerdo con el análisis Patrones y Tasas de Cambio de Uso de Suelo en México, que publicó el año pasado el Instituto Nacional de Ecología (INE), de 1976 a 1993 se perdieron 29 mil 765 kilómetros cuadrados de bosque (superficie equivalente al estado de Guanajuato) y de 1993 a 2000 otros 54 mil 306 km2 (superficie equivalente al estado de Campeche).
México está perdiendo con preocupante rapidez su riqueza boscosa y junto con ella su riqueza biológica pues de acuerdo con organizaciones internacionales, en los últimos 400 años se ha registrado la desaparición de de 47 especies: 15 plantas, 19 peces, ocho aves, cuatro mamíferos y una de anfibios. El mencionado organismo internacional indica que la mitad de las especies desapareció en la década de los 90 y que la tasa de extinción en México es cinco veces mayor a la tasa de extinción natural de especies en el planeta.
Reforestamos México, asociación civil de Grupo Bimbo, se ha esforzado en poner su granito de arena ante estos lamentables datos que no solo ponen en riesgo la vida verde, si no toda la vida sobre el planeta. La conservación de hectáreas en selvas y bosques a través del empoderamiento local de comunidades es parte de las metas y logros de Reforestamos México, con ello, la asociación busca el desarrollo de proyectos productivos que generen ingresos con el fin de reducir la destrucción de los bosques y selvas y elevar la calidad de vida de los habitantes de dichas comunidades.
Reforestamos México rindió cuentas presentando sus resultados del 2008 entre los cuales destacan: 37,875 hectáreas conservadas, 1,674 hectáreas reforestadas y trabajo con 104 comunidades de 17 etnias.

Se despide de ustedes su compañera Valeria Varela,hasta la próxima información.